domingo, 3 de noviembre de 2013

Corazón

"Cerrado por derribo..." dice Sabina en su canción,
Y del eco salta un murmullo
Contando su situación...
En construcción,
Mezcla de pasión,
Sellado de amor,
Valiente,
Hecho de ladrillos,
Fénix,
Hecho de papel,
Se quema,
Es Consumido,
Va en cenizas,
Parchadas y vueltas a rasgar.
Corazón
Numérico,
En plano cartesiano,
Contando en escala -6
Retro,
Cobarde,
Avergonzado,
Agonizante.
Corazón 
Viejo,
De vacíos,
Desenfrenos,
Frenado,
Cansado,
Y con bastón.
Corazón
En cero,
Del limbo,
Sin ganas,
Con miedos.
Corazón 
Rojo
Pálido,
Traslucido,
En blanco.
Corazón
Arrancable,
Desmontable,
Armable,
Y desarmable.
Corazón 
Sepia,
No más visitas,
Clausurado y en demolición.
Corazón en llamas,
Corazón de Fénix.
Corazón solo hay una condición,
No me pidas perdón.


domingo, 1 de septiembre de 2013

Otra realidad.


Si fuera hombre mi mundo sería diferente? Pregunta loca, de esas que me surgen en las noches interminables de pensar en la inmortalidad del cangrejo. Y llovieron las respuestas de esas que me aceleran los latidos. Tanto que es un escrito hecho en dos partes, la primera preguntándome que me falta y la segunda cuando me animé a decir que tengo y que me encanta.
En mi otra realidad hubiera agarrado una mochila a los quince y recorrido mi país sin freno, ya hablaría quichua. Aún no termino de recorrer, quiero más.
Mi primer beso hubiera sido en el kínder, a los cinco y a escondidas, no a los dieciséis a escondidas.
No sería un gran deportista, pero hubiera aprendido yudo, no me gustaría el futbol, pero si el surf y de vez en cuando acamparía. Buscaría siempre nuevas playas y montañas. Amo nadar, y ahora intento practicar capoeira.
Hubiera usado el pelo largo, aunque ya me lo hubiera rapado un par de veces, no usaría barba porque les pica a las mujeres lindas y también me hubiera tatuado más de una vez. Sería buen bailarín de salsa y estaría iniciando tango. Lo contrario de ahora de no cortarme el cabello, haberme llegado a hacer máximo un pearcing luego de poner en jaque a mi mamá, y  ser amante del belly dance, tal vez una odalisca sin gracia o una guerrillera que baila, da igual porque me encanta.
Antes de entrar a la universidad me hubiera ido vivir a algún lugar de un país de esos extraños, de los que nadie visita,  a enseñar a los niños a hablar español y donde queda Ecuador. Pero ahora recuerdo que si me fuí al otro lado del mundo y que los niños me hablaban en cinco idiomas diferentes, ahhhh aún no olvido Marruecos.
Me hubiera enamorado locamente en un día o en un verano pero no hubiera roto ningún corazón. Mejor esto no lo pienso mucho porque casi segura soy culpable, pero eso que lo decida el jurado. Ahhhh que importa los amo a todos.
Me enamoraría de unos ojos bonitos, una mirada que tire a quema ropa al pestañear, una sonrisa coqueta, unas caderas que bailen árabe y un cerebro con ideas. No hablaría con mujeres fáciles, me gustaría conquistar a las complicadas es decir me enamoraría de todas aquellas que brillan en la oscuridad. La realidad es que me describo, lo lamento, no puede ser de otra manera.
Me disfrazaría de fauno que regala rosas de tallo largo con espinas, escribiría un poema diario y hubiera aprendido a tocar armónica o guitarra para ponerle música a mis letras y tocarles una canción a las ninfas al final de la noche, dibujaría con mis dedos sobre su piel, su espalda sería el mejor de los lienzos. Intento aterrizar este párrafo de amor en los tiempos del cólera,  a la época del perreo sucio, pero no puedo sigue demasiado cursi.
Me hubiera graduado de la universidad no sin antes haberme enamorado de una mujer mayor que me enseñe como ser un buen amante, pero antes me hubiera leído el Kamasutra entero para practicar el Tantra sin miedo. Ella hubiera sido insoportablemente inteligente y eso me haría admirarla y reflejarme como espejo. Lástima me siguen gustando los hombres menores que parecen mayores, no hay un prototipo físico, aunque la tendencia radica en los ojos, cejas, miradas que hablen, sonrisas que contagien. Lo triste es que sufro de una rara enfermedad incurable, que dificulta el proceso, soy Sapiosexual. (Persona que se siente atraída por la inteligencia de otra, más que por su apariencia externa). El Tantra ya lo leí.
En todo caso sería todo un Don Juan pero con corazón. Pero usaría la coquetería, manejaría mejor mi carácter, dejaría de amenazar con comerme corazones en salsa de tomate porque no lo cumplo, sería fiel, sería leal, sería igual pero mejor.
También leería un libro por semana y lo regalaría después esperando que caigan con el lector indicado. Me demoro mucho más de una semana, tengo varios esperándome en este momento.
Supiera lo que es sentarme a leer en una playa nudista, me hubiera bañado con tiburones y me hubiera lanzado en paracaídas. Ya me lance en parapente y fue de las sensaciones que hay que repetir, el resto sigue en la lista, no superare el complejo de sirenita, y lo único que llevare a mi playa nudista con tiburones, es un libro y una cadenita con un dije de estrella de mar.
Trabajaría en algo que me guste que me hiciera sentir más humano. Seguiría con las mismas ganas de cambiar el mundo y hubiera hecho más o tal vez menos. Cuando hago lo que me gusta no me pagan con dólares, casi siempre me gano muchas sonrisas, que me las guardo para que me levanten para cuando me faltan las mías. Trabajo por dólares, pero soy millonaria en sonrisas.
A estas alturas manejaría un Jeep de lunes a viernes y el fin de semana escaparía a algún pueblito donde solo se camine y se maneje bicicleta, tiene que tener playa y rojos atardeceres. Mi bien más preciado sería una cámara y no me perdería de imprimir ninguna foto. No tendría celular y aprendería bricolaje. Pensando seriamente en abandonar el celular, hacer un trueque por una cámara y visitar más seguido Ancon, seguro tengo compañera, vamos Mami?
Visitaría las cárceles para intercambiar historias con los presos y darles algo de libertad. Aun no decido como hacerlo podría empezar con una cárcel de mujeres.
Construiría con las manos, con las palabras, compartiría mis sueños y mis anhelos. Volaría cometas en el parque. Soy un desastre con las manos, solo puedo escribir. Amor, me haces una cometa cuando llegues a mi vida por favor.
Llenaría de joyas a mi Madre y le hubiera construido yo mismo un altar para que rece sus rosarios, le hubiera enseñado a pescar a mi hermano. Ya hubiera escrito la biografía interminable de mi Padre y hubiera plasmado en un cuento el único amor con final feliz que conozco, el de mis Abuelos. Mis prioridades impostergables.
Si hubiera nacido hombre hubiera vivido mi vida igual, con los mismos errores pero con más libertades y estaría escribiendo esta noche: “Si hubiera nacido Mujer” aunque ya lo haya plasmado sin género, sin identidad, en este papel.
Sin tiempo,
Sin orden,
Con ganas de esto,
Con ganas de más.
Comenzamos otra vez.


Alicia Keys - Girl on Fire (Me acompaño al escribir este enredo)

Suspirar, una palabra fácil de escribir, difícil de explicar, y tan bella de sentir. A suspirar. 
Aaaaahhh 

domingo, 4 de agosto de 2013

Y mi simbiosis?



Hace poco tuve una conversación extraña con una amiga, (querida Laste voy a resumir nuestra tertulia y todo el revuelo que ocasiono en mi cabeza). Todo empezó con el significado de una palabra acuñada por un científico alemán  Anton de Bary en 1873 el termino botánico es SIMBIOSIS.
Y se dio luego de escuchar varias veces una canción, que nos gusto por casualidad a ambas mientras se repetía en mi playlist, fue varias veces dedicada sin sentido o con el: "Mi Caramelo de Bersuit Vergarabat"
Según nuestra charla la simbiosis era la relación benéfica que tienen dos microorganismos entre ellos, no estábamos lejos del concepto, ya que luego lo buscamos en Wikipedia, pero que fácil fue profundizarlo y exagerarlo hasta transformar los microorganismos en monos, perros, pajaritos, pulgas, elefantes y hasta personas.
La primera relación de simbiosis surgió entre un gatito y un monito. El gatito tenía pulgas y el monito se comía las pulgas del gatito, ambos eran felices y se beneficiaban uno del otro, felices los dos. Creo que es posible que incluso las pulgas fueran felices ya que ellas vivían comiendo del gatito antes de morir haciendo feliz al monito.
La segunda relación  de simbiosis la observe en Discovery Channel con los elefantes en África, pues los elefantes también tienen pulgas, y existen unos pajaritos que se le comen las pulgas a los elefantes y tremendo alivio para los elefantes, que no tienen como rascarse las pulgas, y en ese momento de posible acicalamiento, se produce la felicidad entre estos elefantes y los pajaritos, ya que ambos se benefician mutuamente y de una manera muy natural sin pedir ni mas, ni menos. Seguramente las pulgas también vivían plenamente su felicidad antes de ir directo a su destino final haciendo felices a los pajaritos, y liberando a los elefantes de la tortura.
Luego de estos dos ejemplos me puse a pensar que lindo seria una relación "simbiotica" entre las parejas, porque esto de la simbiosis de los microorganismos, me deja filosofando mas de una tontería, que va mas allá de los conceptos de ganar - ganar, tan en boga en estos momentos y que lastimosamente son también, muy pocas veces utilizados, porque es muy difícil poner nuestros intereses debajo de los del otro. Difícil pero no imposible, si se quiere se puede, todo se puede, o eso dicen los que saben.
Sin pensar en los amores pasados, ni actuales, ni futuros, ni en detalles, solo puedo pensar en que me encantaría tener esa relación de simbiosis, tan sencilla, tan natural y tan benéfica como la de los microorganismos, los gatitos, los monos, los elefantes y los pajaritos de mi tertulia.
Y es donde como mujer me pregunto que me falta, será que me faltan las pulgas, para poder alcanzar ese tipo de extraña felicidad que tal vez la conocí en forma de espejismo o ilusión en algún sueño.
Pero lo que tengo en vez de pulgas son miles de defectos, pecados, orgullos, niñerias y una que otra virtud. 
Y descubrí que lo que me falta son las pulgas o encontrar a alguien con pulgas, pero lo que le digo a mi microorganismo simbionte si alguna vez me lee, es que estoy dispuesta a comerme sus pulgas y a dejar que se coma las mías, aunque estas vivan comiéndose un corazón parchado más de una vez.
Eso si con toda seguridad le envío un mensaje en morse code a Cupido de las pulgas, o me dejas de mandar flechas con fallas técnicas, como leí por allí, o me envías unas buenas pulgas, para mejorar las mías, que tal parece eso es lo que me falta.

Hace tiempo que estoy buscando mi verdadero yo... pero y donde esta mi simbiosis?



Qué linda que estás, 
sos un caramelo te veo en el recreo y me vuelvo loco, 
todas las cosas que me gustan,
tienen tu cara 
y espero los asaltos,
así juego a la botellita con vos, 
mi bomboncito
Qué excitante que estás, 
tendrías que saberlo, 
esa cola es la manzana más buscada,
y esos senos el alimento de mi creación, 
quisiera arrancarte un día
y morirme en un telo con vos, 
o quizás en un auto. 
Han pasado cinco años,
asumiste las cosas
hace tiempo que estoy buscando mi verdadero yo,
hay una especie de simbiosis,
lo dijo mi psicóloga
haría bien a la terapia 
alejarme un tiempo
(unos setenta años) 
Cómo estás querida
tengo esposa e hijos,
de vez en cuando hablo con ella
y hasta hago el amor, 
no es que quiera molestarte,
pero me es imprescindible 
sentarme en un café,
y soñar un poco
y tal vez amarnos
Y ha pasado mi hora,
quién robo mis años,
cambio a toda esta familia
por un segundo con vos, 
si te veo ahora,
aunque termine en un hospicio,
tomo una botella
y juego a la botellita con vos...

Concepto de Simbiosis según Wikipedia.
El término simbiosis (del griego: σύν, syn, ‘con’; y βίωσις, biosis, ‘vivir’) es una forma de interacción biológica que hace referencia a la relación estrecha y persistente entre organismos de distintas especies. A los organismos involucrados se les denomina simbiontes.
El botánico alemán Anton de Bary en 1873 (o 1879, según autores) acuñó el término simbiosis para describir la estrecha relación de organismos de diferente tipo. Concretamente la definió como «la vida en conjunción de dos organismos disímiles, normalmente en íntima asociación, y por lo general con efectos benéficos para al menos uno de ellos».1 La definición de simbiosis se encuentra sometida a debate, y el término ha sido aplicado a un amplio rango de interacciones biológicas. Otras fuentes la definen de forma más estrecha, como aquellas relaciones persistentes en las cuales ambos organismos obtienen beneficios, en cuyo caso sería sinónimo de mutualismo.2
La simbiosis suele identificarse con las relaciones simbióticas mutualistas, que son aquellas en las que todos los simbiontes salen beneficiados. Por analogía, en sociología, puede referirse a sociedades y colectivos basados en la colectividad y la solidaridad.



martes, 16 de julio de 2013

Mi Rompecabezas

En este laberinto que se llama vida voy con la mochila al hombro y especialmente ahora, en este tiempo de locos,  dentro va mi rompecabezas desarmado con cientos de piezas del fondo de mi alma, me miro, lo armo, lo desarmo,  y lo vuelvo a armar; algunas veces segura y otras veces con duda. Siempre con ganas. He aquí algunos pedazos de mi…

Mientras voy,
Sintiendo
Amando
Queriendo
Extrañando
Añorando
Creciendo
Peleando
Caminando
Volando
Aprendiendo
Viviendo.
Me gusta,
Abrazar
Besar
Oler
Apretar
Ayudar
Admirar
Mirar
Escuchar
Comer
Lo picante
Lo amargo
Lo dulce
Lo cursi
Lo tierno
El Romance
Lo suave
Lo real
Lo mágico.
Porque,
Tengo la sonrisa fácil
Pero me frunzo rápido
Me rio a carcajadas
Y miro de frente
Se llorar
Se jugar
Se amar
Me ilusiono
Me enamoro
Me desenamoro
Enloquezco
Sueño.
Y creo,
En Dios
En mi madre
En lo posible
Imposible
En lo justo
En el cambio
En hacer el amor y no la guerra.
Por eso me armo y me desarmo al compás de la música que me tocas destino, bailándote sin freno no se qué quieres pero voy con fuerza que hay días como hoy en los que tengo ganas de subirme al mundo para cambiarlo o comérmelo en el intento. Sobreviviéndome y venciéndome.

Te extraño así Maria Mercedes,

                                                f.- Maria Mercedes

martes, 2 de julio de 2013

El Juicio de un asesino.


El asesino espera temeroso el último juicio.
El tiempo ha sido cruel, inexorable.
Lo vienen a buscar, llego la hora.
El tic-tac del reloj lo atormenta y se distingue ante cualquier sonido.
Tiene la bruma espesa del miedo, nublándole el rostro.
Mira de frente, con los ojos apagados.
Con la altivez de la soberbia, ocultando su desdicha.
Camina en silencio, le va gritando su conciencia: “Asesino”.
Y las cadenas se le hacen más pesadas al andar, no soporta la condena.
Lento va, así como los años grises contados tras sus conquistadas rejas.
No quiere mirar hacia atrás. Se resiste a recordar.
Prefiere el olvido, se alimenta del rencor. 
Le resta la ilusión, entre el sueño y la realidad.
Remordimiento
Costumbre
Tristeza
Soledad
Dolor, cuanto puede pesar el dolor.
Tiene que soportarlo, no puede pararlo, lo tiene encadenado.
Maniatado y agotado, sobrevivir entre lamentos fue demasiado.
Porque el reo está cansado de llorarle a su víctima.
Aquel cadáver enterrado en el fin de los lamentos.
Sus lágrimas se secaron y se acabaron esperando.
Merecida espera, en la antesala de la sentencia, sabe lo que viene.
El acusado se siente ya condenado.
Culpable, inapelable, pena de muerte para el acusado.
Sin esperanza, vuelve a su celda.
Conversar con sus muertos de su desilusión, es su distracción.
Mientras se acerca el día, de ponerle rostro a su verdugo.
Y allí está, ella lo mira con compasión. La Santa Muerte viene a buscarlo su perfume está en el aire.
Lo besa en los labios, mientras expira su último aliento.
Se escucha como se terminan de rasgar los débiles retazos de un corazón.
La vida del asesino se extinguió. Se hizo justicia terrenal.
La envidia bailo un vals sobre su tumba. El mundo lo celebró.
Asesino y Victima se encuentran más allá del bien y del mal.
Perdóname Amor.
Su víctima le sonrió.
El Asesino era yo, mi víctima era el Amor.


"Le dije a mi corazón 
sin gloria pero sin pena 
no cometas el crimen varón 
si no vas a cumplir la condena"
A.Calamaro
24728-08

miércoles, 27 de marzo de 2013

Una raya mas al tigre


Despabílate Amor, así como lo decía Benedetti. 
Despabílate Mujer, me digo mirándome al espejo. Contándome las rayas, con el temor a flor de piel, con las ganas enterradas, con las manos atadas, con dos ojos negros bien abiertos, y las mejillas saladas.
Hace quince días van y vienen las noches, prendiéndose las velas, poniendo la Fe a prueba. 
Hace siete días, se viven historias diferentes, más la mía sin escribir. 
Y aquí estoy mirando a Tía Meche una mujer anciana en su féretro, cubierta del amor de sus hijos y sus nietos, descansando en el sueno placido, profundo y eterno de la muerte.
Veo a Tía Ara, una mujer de antes, muy querida y abnegada llena del amor de Dios, cubierta por la fuerza de su esposo, el carino de su hermana y los ojos tristes de mi madre a la distancia, mientras va aferrándose a la vida, luchando por salir lentamente de la fría sala de un hospital.
Tengo de frente a Geoconda una mujer, que casi no conocí, pero hoy la vi cubierta por la sombra de las mariposas negras, desafiando al cáncer por sus hijos.
Siento de lejos pero golpeándome fuerte, el pre infarto de Joselo un grande de Perú, y la anemia de Marianita, una guerrera argentina del VIH.
Grandes ejemplos de lucha, cuantas senales... 
Y me aterrizo bruscamente en mi realidad, donde estoy parada en un limbo, donde ademas de mis continuas alergias, mis s.p.m. mis cólicos mensuales, descubrí en estos días un par de insignificancias casi imperceptibles que me aterraron sobremanera, que sumadas a la fobia a las inyecciones o el pánico escénico de entrar a una clínica, me hicieron colapsar.
Hace cinco minutos me cuento las rayas, con todas las penas y glorias que llevan, mientras me agarran la piel y me hacen la vida, no me voy a preguntar mas por el manana, ya pasara, todo pasa y todo cambia. Pero esta noche se me hace larga, se me hace eterna, y me pesa mucho mi lanza, tal vez esta noche me toma de rodillas, seguramente luego me pondré de pie. Despabílate mujer.


Despabílate Amor - Mario Benedetti
Bonjour buon giorno guten morgen,
despabílate amor y toma nota,
sólo en el tercer mundo
mueren cuarenta mil niños por día,
en el plácido cielo despejado
flotan los bombarderos y los buitres,
cuatro millones tienen sida
la codicia depila la amazonia.

Buenos días good morning despabílate,
en los ordenadores de la abuela ONU
no caben más cadáveres de Ruanda
los fundamentalistas degüellan a
extranjeros,
predica el papa contra los condones,
Havelange estrangula a Maradona
bonjour monsieur le maire
forza Italia buon giorno
guten morgen ernst junger
opus dei buenos días
good morning Hiroshima,
despabílate amor
que el horror amanece.



miércoles, 6 de febrero de 2013

Don Cleofe y Doña Margarita






Hace un par de días conocí una pareja de esposos, Don Cleofe y Doña Margarita, ellos no son personajes celebres, ni famosos, son  una pareja de Adultos Mayores,  de 73 y 76 años respectivamente, pero que sinceramente prefiero llamar viejitos enamorados, guardándome un poco del cariño que compartieron conmigo,  porque me hicieron recordar la ternura del amor tardío en pocos minutos.


Estaba en mi oficina rodeada de números, tasas de interés, envuelta en un aire un poco frío y calculador, pero trate de recordar que mi profesión va mas allá de las estadísticas, de las cifras y que también tiene que ver con lo social, con el avance que podamos lograr no solo individual si no colectivo y tratando de servir a la sociedad desde cada uno de nuestros espacios. Lo vivo, lo siento y lo expreso así, solo para recordarles a mis colegas economistas parte de las premisas de nuestra labor. En lo personal no veo números, veo personas, y es así como se pueden conocer este tipo de historias.

Al mirar esta pareja que se acercaba a mi escritorio, tomados de la mano, y con su caminar pausado tenia en frente lo que corporativamente se les llama clientes VIP, excelente historial y con muchos negocios en sus cuentas. Sin embargo ellos eran tan simples y sencillos que mientras yo hacia mi trabajo, ellos lo que me reflejaban era claridad, tenían un aire de cotidianidad que relajaba en extremo en su conversación.

Cuando los vi sentarse frente a mi, lo primero que se me ocurrió fue preguntarles cuantos años tienen de casados, a lo que ella sacándose sus gafas oscuras, que ocultaban su ceguera, guardando unos ojos azules, y con una enorme sonrisa, llena de orgullo respondió: “El próximo 14 de Febrero, cumplimos 50 años de casados, celebraremos a lo grande nuestras Bodas de Oro, quiere que le cuente Niña Meche como fue que nos enamoramos?”  Mi respuesta fue inmediata y fue un ansioso Si.

El: Yo soy de Manabí, en aquellos tiempos, acababa de cumplir 20 años y siempre iba  a Playas, a pilar café con mi Padre, era todo un ritual, hacerlo me encantaba.

Ella lo interrumpe y me dice en tono cantado: Niña ha escuchado ese pasillo que dice, te enamore tirándote piedritas en el arroyo, pues así lo enamore.

El: Mientras pilaba el café, empecé a sentir como caían en mi espalda piedritas, primero una, luego fueron varias, y al voltearme veo desde la colina a tres hermosas señoritas risueñas escondiéndose tras un árbol. Me dije ellas quieren conmigo, así que inmediatamente me dirigí a su casa a pedirles un vaso de agua.

Ella: Mientras el más se acercaba más nos reíamos mis hermanas y yo, echándonos la culpa la una a la otra, hasta que me decidí a afrontar las consecuencias de mi acto de coqueteo desenfrenado. Es que Niña, yo ya tenia 23 años y me estaba quedando en la percha tenia que agarrar a ese toro por los cuernos. Por cierto ¿Cuántos años tiene Ud. mi niña?

El: Así me enamoro ella con un par de piedritas, me agarro, es que ella era mayor que yo, pero yo  caí rendido a sus pies y aquí me tiene 50 años después. Pero no todo fue color de rosas, me enamore tanto que me comí esa presa antes de tiempo, y hasta preso me fui, su familia solo me dejo salir el día que decidieron ellos seria el ideal para nuestra boda aquel 14 de Febrero de 1963, me llevaron una camisa y un pantalón me bañe en el calabozo y subí al registro civil que para mi suerte estaba encima de la cárcel. Fue allí donde me esperaba mi princesa, nerviosa pero feliz estaba tan hermosa y lo sigue estando, por eso la próxima semana celebro mi aniversario con mi gran familia, mis hijos, mis nietos, mis bisnietos, mis 250 invitados, mucha comida, mucho whisky, mucha fiesta,  es que voy a celebrar en Playas el lugar donde me enamore, deje mi tierra por ella, lo dejo todo por ella.

El mientras termina su relato, acaricia suavemente su blanca cabellera, la mira con ternura.

Le pregunto a ella cual es el secreto de tanta felicidad y me contesta, con un largo suspiro, Ay niña si es q este bandido era terrible me hizo unas buenas, era y sigue siendo mujeriego, pero ha sido tan dulce conmigo que hasta diabetes me dio, me comenta riéndose pícaramente, a pesar de contarme de su trágica enfermedad, se lo toma con una somera tranquilidad.

Pero cual es el secreto le insisto sin medida, así como queriéndole robar el fuego a los Dioses del Olimpo.

Ella: El secreto es la Paciencia.

Se despiden entre risas, se van como llegaron tomados de la mano, y diciéndome que me enviaran  un pedazo de la torta de los novios.

Me quedo suspirando, pensando, sintiendo, que no es la primera vez que escucho de esas Grandes Historias de Amor, que tengo dos ejemplos cercanos,  y aunque parezca que no aprendí  nada, siempre me hacen llenar el corazón de orgullo. Es que en esta época de guerras, egoísmos, perversiones, y desilusiones, es valido y sagrado compartir el mensaje de esos amores de antes, de esos amores sin fecha de caducidad.

A ustedes,
Santiago y Olimpia
Victoriano y Mercedes

Que aunque no celebraron en la tierra esas Bodas de Oro, estoy segura que brindaron por su amor más allá del tiempo, más allá del cielo, más allá del más allá.


lunes, 14 de enero de 2013

Simple Felicidad

Aquella felicidad, tiene olores, tiene sabores, tiene colores, tiene recuerdos.
Mis cinco sentidos, explotan sin freno al sentir esos momentos de alegría guardados en el baúl de mi memoria. Ese sexto sentido oculto me hace tocar el infinito de lo imposible, me hace volver a vivir lo vivido, y me hace soñar más allá del tiempo.

Esta felicidad, viene cubierta por un "déjà vu" de otra época, envuelta en esperanza, cubierta de una extraña fe de lo posible y aunque tambalea se mantiene intacta, incorruptible, abre mi mente, rompe mis paradigmas, me enseña, se sobrepone, camina, vuela conmigo.

Esa felicidad, la que viene con la sorpresa, la que hace cosquillas, la que no tiene miedo, la que lucha, la que abraza, la que ama, la que anhela, la que me regala sonrisas, me toca hasta las lágrimas y vuelve a hacerme sonreír.

Mi simple felicidad, viene dada de momentos, escritos en el amor de mis abuelos, en los ojos de mi madre, en la locura de mi padre, en las carcajadas de mis hermanos. Tiene mar, tuvo desierto, tuvo montañas, tiene río, tuvo amores, tiene pasiones, tiene ilusiones, tiene sueños, tiene mochila, tiene letras, tiene música, tiene baile, tiene fuerza, tiene ternura, tiene tiempo, tendrá caminos. Así de simple es mi felicidad.